Ya estamos de vuelta

Cuando el regreso de vacaciones es una vuelta… al punto de partida

Ya estamos de vuelta, aunque en realidad… la sensación es que no nos hemos ido nunca.

En Ulises Comunicación ya estamos de vuelta de estas extrañas vacaciones, que como a la mayoría de las personas nos ha tocado vivir.

Nos gustaría poder decir que por fin nos vemos las caras, pero no es más que un deseo porque aún nos acompañan nuestras inseparables mascarillas, que han venido a quedarse y por un buen tiempo.

Volvemos con ilusión, con la misma que con la que nos hemos ido, para tratar de desconectar o más bien de conectar con los amigos, con la familia, con la naturaleza; pero este año no ha sido posible poner tierra de por medio porque las condiciones de las zonas de destino se parecían demasiado a las de partida. 

La realidad es que en esta nueva normalidad la palabra nueva va perdiendo su sentido como adjetivo, para quedarse en un mero acompañante de una normalidad que ya se ha instalado en nuestros hábitos y cultura.

Ya estamos de vuelta

El teletrabajo será ya una modalidad adoptada por todas las partes en la que los responsables y mandos tendrán que ponerse las pilas para liderar equipos y personas, entendiendo que no pueden tenerlas siempre compartiendo un mismo espacio y confiar en ellas, sin caer en el control permanente.

Los empleados tendrán que desarrollar las habilidades que sean necesarias, pero salvaguardando la responsabilidad, el compromiso y el excelente cumplimiento de sus tareas.

La vuelta de estas extrañas vacaciones se junta con la vuelta al cole por lo que, si ya era delicado gestionar la incertidumbre de nuestra vida profesional, ahora se multiplica con la de lo que nos espera en colegios, institutos y universidades.

Nuestro pensamiento y solidaridad van dirigidos a las empresas de los sectores más castigados por la pandemia y a los cientos de miles de personas que, entre ERTES y ERES, son las que están viviendo momentos difíciles que tardarán en superar.

Del mismo modo que los brotes y contagios se siguen sucediendo, y los ciudadanos van adoptando poco a poco las medidas higiénicas y de distanciamiento social, observamos las cifras que vamos recibiendo con menos ansiedad, y no porque no sean alarmantes, sino porque ya hemos integrado que esta es una batalla que durará un cierto tiempo. 

Empezamos a saber y creer que las vacunas no serán para mañana como prometen tertulianos y algunos expertos, y que con mucha suerte lo serán para pasados bastantes meses. Con la recuperación económica sucede los mismo. Quedan muchos meses por delante en los que tendremos que ir tomando decisiones día a día y en los que los escenarios pueden variar de la noche a la mañana.

Sigamos trabajando como mejor sepamos hacerlo, imaginando el futuro para ser capaces de innovar y crear, y desarrollar nuevos proyectos y procesos, porque con toda certeza sabremos recuperar el tiempo y las ocasiones perdidas.